La separación de roles entre el hombre y la mujer, ha generado a lo largo del tiempo, continuos debates y discusiones. Dentro de ese contexto, los preceptos de igualdad de oportunidades y equidad de género se ven vulnerados, en tanto que actualmente, tan sólo se reconoce el derecho al goce de licencia post natal a las mujeres.
El Congreso de la República, gracias a la iniciativa de la Dra. Mercedes Cabanillas, autora del proyecto y la Congresista de la República Sra. Cecilia Chacón De Vettori realizó el foro: “Presencia del Padre en los primeros días del nacimiento de un hijo.- fortalecimiento familiar” con el objetivo que la sociedad civil tome conciencia sobre la importancia de la unión familiar en los eventos vitales de sus miembros, reforzándose así el sentido de la paternidad responsable y, por otra parte, el desensibilizar e informar a la ciudadanía sobre este tema.
El Instituto Nacional Materno Perinatal - Maternidad de Lima, con 182 años al servicio del binomio madre-niño, participó de este importante evento con la presencia de destacados profesionales, entre ellos el Dr. Julio Portella Mendoza - Director Ejecutivo de la Dirección de Investigación, Docencia y Atención en Neonatología de nuestro Instituto, quien expuso el tema “Contacto precoz del recién nacido con los padres: un momento que dura toda la vida”; en este tema, el Dr. Portella abarcó las bases naturales del apego en la historia de la humanidad y la importancia del contacto precoz del recién nacido con la madre y, si es posible, también con el padre. Debe tenerse en cuenta que en nuestro instituto se atienden alrededor de 18 mil nacimientos anuales, de los cuales el 8% son prematuros, quienes en especial necesitan de la presencia de ambos padres para su desarrollo sensitivo y emocional.
En este contexto, nuestra institución como establecimiento de salud, tiene el rol de contribuir al bienestar de la familia (padre, madre e hijo), y para ello viene implementando un programa que incluye la presencia directa del padre en el desarrollo del proceso gestacional de la madre. En su participación, el Dr. Portella recalcó que en investigaciones realizadas con modernas técnicas de neuroimágen funcional, se demuestra que la maternidad y paternidad provocan cambios funcionales en el cerebro de ambos, quienes responden con mayor intensidad al llanto que a la risa del hijo. De esta manera, la influencia fisiológica de la paternidad en el cerebro, facilita el cuidado del neonato, al reconocer mejor las necesidades del niño que reclama llorando.
Al concluir su presentación, manifestó que “al darse la licencia por paternidad, nos permitirá recuperar los espacios sociales y antropológicos modificados por las prácticas hospitalarias y fomentar, en este corto pero valioso tiempo, la participación del padre en el momento del parto para reforzar el desarrollo del apego, colaborando de manera estrecha con la madre en el cuidado del recién nacido”.