Las mujeres con sobrepeso al inicio del embarazo tienen mayor riesgo de desarrollar diabetes gestacional, que si no se trata oportunamente puede afectar la salud de la madre y el futuro bebé. Entre las principales complicaciones las mujeres pueden presentar presión alta, convulsiones, retención de líquido y exceso de líquido amniótico.
“En el feto puede provocar retardo de crecimiento intrauterino, malformaciones congénitas e incluso consecuencias más graves”, afirmó la doctora Gloria Larrabure, médico endocrinóloga del Instituto Nacional Materno Perinatal.
La especialista indicó que las mujeres que padecen obesidad o sobrepeso no deben ganar más de siete kilogramos durante el embarazo. “Lo ideal es que la mujer inicie la gestación con un peso acorde a su talla. Para evitar el aumento de peso se debe realizar ejercicio físico diario y llevar una alimentación saludable”, señaló.
Otros factores de riesgo, además del sobrepeso, para desarrollar este tipo de diabetes gestacional es tener antecedentes de familiares con esta enfermedad, haber sufrido abortos repetidos, muerte intrauterina o bebés que hayan pesado más de cuatro kilogramos o más al nacer.
La detección de la diabetes gestacional debe hacerse desde el primer nivel de atención a toda embarazada, presente o no factores de riesgo, mediante una prueba de glucosa en sangre o un test de tolerancia oral a la glucosa a las 24 o 28 semanas de gestación